La reducción de una quinta parte de la fuerza laboral, dijeron, obedece a una reforma en toda Europa, ya que quieren reinventar la marca y centrarse en los autos eléctricos. Un dirigente del sindicato Unite para el sector de la industria declaró que el gremio exigirá a la empresa que abra las cuentas.
La mayoría de las pérdidas se producirán en las instalaciones de Ford en Dunton, Essex, donde se suprimirán hasta 1.000 puestos de trabajo.
Los 300 restantes corresponderán a funciones administrativas repartidas entre los cinco centros de la empresa en el Reino Unido.